En entradas anteriores hemos
comentado el poder que tiene y da la energía, además del que poseería la humanidad si
la tuviera de forma infinita y gratuita…, porque ¿qué serían las grandes
potencias sin electricidad? Creemos que sabéis
todos la respuesta, porque seguro alguna vez os habréis planteado lo
duro que sería el no tener ordenador,móvil, lavadora, televisión o siquiera forma alguna de cocinar la comida, si no es como muy antiguamente al
fuego.
Pero la verdadera cuestión es si
os habéis planteado como sería el poder tener energía infinita sin esfuerzo y
gratis, tal como se planteó y quiso Tesla.
Muchos científicos, incluido él, a lo largo del tiempo han querido construir máquinas que sean capaces de
crear electricidad, como el
motor de rayos cósmicos de Tesla, ya mencionado.
Pero con eso no se crea energía ni gratuita ni infinita, esa energía como muy bien dijo nuestro implacable
científico se encuentra en la naturaleza, la llamada ENERGÍA DEL PUNTO CERO.
Esta energía se encuentra en toda
materia existente, es en física la energía más baja que un sistema físico
mecano-cuántico puede poseer además de ser la del estado fundamental del
sistema. Este concepto fue propuesto por Albert Einstein y Otto Stern en 1913.
La energía punto cero se obtiene
cuando algo se enfría hasta el CERO ABSOLUTO, casi a unos 300°C
bajo cero en el que todo movimiento atómico cesa y se produce una parada total:
el punto cero de la naturaleza. Pero incluso cuando llega la materia a estas
condiciones, la energía persiste como una radiación de fondo que no debería
estar ahí, (lo que llamó Nikola como energía cosmológica aunque no supiera bien
de donde venía).
La presencia de dicha energía no se ha podido explicar con exactitud mediante las teorías tradicionales, sólo la física cuántica ha podido, la cual admite que hay movimiento incluso cuando la materia está congelada a estas temperaturas.
La presencia de dicha energía no se ha podido explicar con exactitud mediante las teorías tradicionales, sólo la física cuántica ha podido, la cual admite que hay movimiento incluso cuando la materia está congelada a estas temperaturas.
Y os preguntaréis cómo es
posible… pues bien es sencillo, las partículas no pueden moverse hacia arriba, abajo,
hacia la derecha o hacia la izquierda, pero, pueden existir y dejar de existir
en menos de un abrir y cerrar de ojos, y con ese continuo parpadeo producir
energía como hemos dicho anteriormente; infinita e incesable.
De haberse descubierto este hallazgo con anterioridad, Nikola Tesla con certeza habría conseguido la forma de
extraerla; pero como a muchos de sus inventos y descubrimientos la sociedad lo habría encubierto
y tomado a él por loco. Es triste el pensar que por haber destacado más que los
demás, en vez de idealizarlo como a otros científicos, lo menospreciaron y lo
tomaron como una amenaza.
Por lo que en honor a la verdad,
deberíamos escribir y desvelar al mundo la vida, las obras, los pensamientos
revolucionarios y los grandes aportes que brindó a la humanidad en materia
tecnológica este magnífico “genio
olvidado”, llamado Nikola Tesla. Porque todas las comodidades que muchos
poseemos hoy en día son gracias a su esfuerzo y esperamos, que algún día se
reconozca mundialmente el mérito que se merece NIKOLA TESLA.
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